Entre el Renacimiento y el Romanticismo en Chanel Métiers d’art
Gabrielle Chanel se rodeó de lo mejores artesanos de París, para hacer realidad su visión creativa. Algunas décadas después, la maison se entregó a la misión de apoyar compañías artesanales, comenzando en 1985 con la adquisición de parurier Desrues.
Pasó el tiempo y surgió Chanel Métiers d’art en el 2002, un homenaje al inigualable savoir-faire francés. Desde entonces, la maison realiza un excepcional tributo cada año, alimentando continuamente el diálogo entre Chanel y los artesanos que con su talento y expertise hacen realidad exquisitas creaciones. Esta colección Ready-to-Wear, se presenta anualmente en el mes de diciembre, siempre orientada hacia un destino, real o imaginario, que se entrelaza con una historia de Chanel.




Este año, Virginie Viard, directora creativa, el círculo de Métiers d’art y el equipo de diseño de Chanel, reunieron a un centenar de bordadores expertos, artesanos de la pluma, paruriers, plisadores, zapateros y sombrereros ubicados en París, el resto de Francia e Italia, para develar la propuesta en el Château de Chenonceau, dentro del Château des Dames.
Un espacio diseñado y habitado por mujeres como Diane de Poitiers y Catherine de’ Medici, siendo el emblema de esta última, un monograma compuesto de dos C entrelazadas, como el de Chanel. «No sabemos si Coco se inspiró directamente en ella, pero es muy probable porque admiraba mucho a las mujeres del Renacimiento. De ahí nace su gusto por las gorgueras de encaje y la estética de algunas piezas de su joyería. En el fondo, este lugar es parte de la historia de Chanel», comenta Viard. En 1936, Gabrielle Chanel escribió un artículo sobre las mujeres de esta histórica época: «Siempre me ha impresionado un extraño sentimiento de simpatía y admiración hacia las mujeres que vivieron desde François I hasta Luis XIII, tal vez porque las encuentro increíble, con una magnífica sencillez y una majestad imbuida de onerosos deberes».


Entre motivos de cuadros en blanco y negro en el suelo, el desfile se desenvolvió en una gran galería que remite a un juego de damas tamaño real. Aparecen minifaldas de lentejuelas, así como una falda larga de tweed geométrico con flecos. También un abrigo largo de terciopelo negro, inspirado en «La novia vestía de negro», ya que después del fallecimiento del rey de Francia Enrique II, Catalina de 'Medici jamás volvió a utilizar otro color. Esta pieza se abre para revelar al interior un bodysuit en tweed. Sobresalen los tonos cálidos de una capa en tweed también, haciendo eco de los famosos tapices del castillo, mientras que las flores de los jardines, creados por Diane de Poitiers y Catherine de 'Medici, fueron el punto de partida de los magníficos bordados florales.


Los cómplices artesanos de Chanel deslumbraron más que nunca en esta propuesta. Por un lado, un vestido largo de encaje negro con puntuadas con tachuelas, realizado por Lemarié; la parte superior de un vestido de damasco bordado íntegramente por Lesage; luego, las sandalias con plataforma plateada brillante en bicolor y tacones de Massaro.
Para el año 2021, once maisons d´art se trasladarán a Le 19M, un nuevo establecimiento de Chanel en el 19th arrondissement de París, dedicado en su totalidad a Métiers d’art. Así, Chanel continuará preservando el trabajo de los artesanos y, claro, el savoir-faire francéss.