En una época donde los periódicos no se atrevían a mencionar la palabra «queer» en sus contenidos, el 28 de junio de 1969 marcó el inicio del movimiento por la lucha de los derechos para la comunidad LGBTQ+ y el inicio del primer Pride Parade en el mundo.  

La historia comienza en la d&eacute;cada del 60, donde el clima social exig&iacute;a la igualdad para la comunidad queer, la lucha por los derechos igualitarios de las mujeres y personas de color &ndash;incluso la Guerra de Vietnam&ndash; forjando un panorama rebeli&oacute;n. En 1964 el alcalde Robert F. Wagner, Jr. de la ciudad de Nueva York contemplaba en su agenda el limpiar las calles para cuidar la imagen de la ciudad y as&iacute; fomentar el turismo, enalteciendo la imagen conservadora de la &eacute;poca. Considerada como un desorden mental &ndash;y por ende su pr&aacute;ctica era ilegal&ndash;, la atracci&oacute;n por el mismo sexo foment&oacute; la creaci&oacute;n de lugares ilegales, donde se permitiera un ambiente libre de juicio para revelar el &laquo;verdadero yo&raquo;. Greenwich Village, se posicion&oacute; r&aacute;pidamente entre la comunidad queer por ser un barrio liberal y libre de rechazo social. Ah&iacute;, eran pocos los lugares que dejaban una posibilidad de convivencia y entre ellos estaba el bar Stonewall Inn. Ubicado en Christopher Street, fue adquirido en 1966 por la mafia. El bar originalmente serv&iacute;a como centro nocturno y restaurante heterosexual, sin embargo, sus nuevos due&ntilde;os &ndash;la mafia&ndash; cre&iacute;an que un negocio que atendiese a la comunidad gay &ndash;que de otro modo se rechazar&iacute;a&ndash; podr&iacute;a generar ganancias, adem&aacute;s de exigirles pagos regulares por &laquo;protecci&oacute;n&raquo; a sus comensales.&nbsp;

Marcha en Times Square, 1969. Fotografía por Diana Davies, Biblioteca Pública de Nueva York / Cortesía. 

Jóvenes frente al Stonewall Inn, 1969. Fotografía por Fred W. McDarrah / Cortesía 

Redada de Stonewall, 1969. NY Daily News / Cortesía

A los pocos meses, Stonewall Inn su popularidad aument&oacute; por su pista de baile. Si bien las redadas policiales eran comunes, era uno de los pocos bares de la ciudad donde las parejas pod&iacute;an tener citas libremente, dando seguridad a sus asistentes por el pago de su propia protecci&oacute;n. En una redada sorpresiva, Seymour Pine de la Divisi&oacute;n de Moral P&uacute;blica del Vice Escuadr&oacute;n de la Ciudad de Nueva York y otros oficiales encubiertos, atacaron el lugar arrestando una decena de personas. En un intento fallido por controlarles, una multitud de clientes liberados y espectadores comenz&oacute; a crecer fuera del establecimiento. Seg&uacute;n el escritor David Carter, aumentaba a medida que avanzaba la noche y la multitud se descontrol&oacute; volcando a la violencia. La tensi&oacute;n generada entre los elementos de seguridad y los residentes del barrio produjo m&aacute;s protestas sucesivamente al paso de los d&iacute;as. En cuesti&oacute;n de semanas, los residentes se organizaron en grupos de activistas para concentrar esfuerzos con el fin de establecer lugares para que la comunidad queer pudiese manifestar abiertamente su orientaci&oacute;n sexual e identidad. A partir de 1970 las Marchas del Orgullo se convirtieron en un legado y un discurso a favor de sus miembros, luchando en contra de cualquier forma de discriminaci&oacute;n social y constitucional.

Voces de unión: la historia detrás de Stonewall Inn

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