Juana Bautista: La joya secreta de Jalisco
“Queremos honrar lo que se hace en México, y también resaltar la hospitalidad que nos caracteriza”, afirma Mónica Escoto, mente creativa detrás de Juana Bautista Hotel Boutique. Un proyecto que, podríamos afirmar, le buscó a ella en vez de al revés.
Poco se sabe sobre Juana Bautista, personaje que da nombre al hotel. Esta mujer fue protagonista de una apasionante historia en el periodo de la Conquista. La valiente reina Cihualpilli Tzapotzinco, del señorío de Tonalá, rompió paradigmas al convencer a su pueblo de recibir a los temidos conquistadores con un banquete para evitar el baño de sangre en esta hermosa tierra. El encanto y la amabilidad de Juana Bautista Danza, como fue llamada desde ese momento, marcaron la pauta para la formación del reino de la Nueva España.
En las manos de Mónica, esta leyenda resurge para dar vida a un concepto inigualable en la hospitalidad jalisciense. Su visión de fue clara: reinventar el lujo clásico y decorar los espacios con mobiliario y artesanía local para lograr que la atmósfera de Tlaquepaque estuviese presente en toda la casa.




Arquitectónicamente han respetado los muros y las columnas de cantera gris de esta casona histórica del siglo XVI. En el interiorismo, texturas aterciopeladas y materiales cálidos se combinan delicadamente para respetar elementos del pasado, como los pisos de mosaico con patrones geométricos. Además, se añaden toques tradicionales a través de textiles artesanales que juegan estéticamente con contundentes piezas de materiales opulentos, como el cuero y el mármol.
¿Lo más original? Sus siete suites, todas únicas y genuinamente diferentes, poseen nombres de canciones mexicanas: Amor Eterno, Cielito Lindo, El Rey, Nube Viajera, Hermoso Cariño, Motivos y, por supuesto, Las Mañanitas.



